Pared doble

La pared doble está formada por paneles prefabricados con lechada de hormigón. Para ello se unen a ierta distancia dos paneles de hormigón paralelos de al menos 5 cm de espesor mediante armaduras de celosía. Los encofrados de hormigón ya contienen la armadura estática. Las paredes dobles se suministran de fábrica ya prefabricadas, se entregan y se montan en la obra y allí se rellenan con hormigón hasta obtener una pared maciza. De este modo se obtiene una sección transversal total monolítica endurecida. La ventaja de la pared doble reside en la construcción sin encofrado, lo que supone una reducción significativa del tiempo de construcción y la preservación de dos superficies de encofrado lisas.

Sector de aplicación:
Las paredes dobles se utilizan para edificios residenciales, administrativos, comerciales e industriales, así como para proyectos industriales y resultan ideales para zonas con actividad sísmica.